¿Me hiciste caso cuando te dije déjate sentir...?






Sé que hace días no nos encontramos en este espacio que tanto te gusta o le has cogido el punto... y parece que se haya enfriado un poco... pero, tú sigues ahí y yo sigo aquí. 

Y quizás, en ese tiempo, visitaste otros espacios y desde otras palabras de otros sentires, te aportaron aquel impulso que necesitabas y buscabas, antes, aquí y te preguntabas... 

¿Qué estará haciendo? ¿Dónde se habrá metido?

Sé que has percibido un cambio y que de manera paulatina lo has ido viendo y te has dado cuenta que lo has visto más desde el sentir que del ver...  hoy te cuento que es verdad y es un cambio profundo para ti y para mi, para mí y para ti, en el que nos encontramos ya en un volver a nacer... y para bien. Y qué bueno que sigamos ahí, yo escribiéndote y tu leyéndome...

Yo he seguido dibujando mis palabras y mis sentires en otros espacios, en otras escuchas, en nuevos lugares.

Sé que me has echado de menos, a mi me ha pasado lo mismo... y... qué bueno es, cuando en la espera, en este silencio reflotan nuevas resonancias que no sabíamos ni tú ni yo que había entre nosotros y seguimos con nuestra vida, con nuestro entorno y... volvemos a encontrarnos y retomamos como si nada. 

¿Será que esto no se romperá nunca?

¿Te has dado cuenta de lo bello que es porque justamente lleva el color de la libertad, el tinte de la inquietud, el trazo de la búsqueda y el asentamiento del encuentro? Y te pregunto si no estaremos haciendo puro arte...

¿Cómo te ha ido? Yo sé de ti que han soplado nuevos vientos y que te han sacudido unas cuantas veces... Sé que muchas noches te has dormido y te has sentido acompañado de una compañía que no sabrías decir si es tangible o no y que al despertar te has dicho 'qué rico el dormir de hoy...' sin saber muy bien el por qué aunque sabiendo tu alma el qué... Sé que has reído y que en algunas ocasiones has sentido que has perdido y que quizás has llorado y... ¿quieres que te cuente algo? A mí me ha pasado lo mismo porque dónde estás tú, estoy yo y donde estoy yo, estás tu... y conviviendo, sintiéndonos, nos damos cuenta que todo lo llevamos dentro y ahí estamos los dos.

¿Me hiciste caso cuando te dije 'déjate sentir'?... y que te tomaras tus tiempos propios para viabilizar, descubriendo tu propia coherencia y desde ella darte permiso para aprender?

Yo sé que lo intentaste como mínimo y tú sabes que fue nuevo, divertido o al menos curioso...y que en algún rincón de ti hubo una vocecita que te decía a lo bajini: ''gracias, te esperaba...''.

Hoy, te vuelvo a dar de nuevo la bienvenida porque hace muchas semanas te tengo sin mis palabras y te voy a pedir que hoy no sólo las leas y te vayas. 

Te voy a pedir que las aparques.., sí, has leído bien, a todas ellas e invites a tu interior lo que surja y quizás desde alguna parte de ti, nace algo nuevo o se genera un nuevo encuentro.

...Nos vemos pronto. 


Y ya sabes que estoy aquí, caminando como tu 
...y aprendiendo a volar...

No hay comentarios: